El título del libro de Edith Pearlman, Miel del desierto, hizo que no pasara desapercibido para nosotros en el expositor de la biblioteca, y que acabara en nuestra casa para una lectura más detallada.
En los últimos meses no hacen más que surgir novedades editoriales por doquier, que incluyen la palabra miel o abejas en su título, lo que nos alegra y permite disfrutar aprendiendo.
La contraportada de este libro nos confirmaba que se trataba de una recopilación de 20 relatos de esta escritora estadounidense, considerada una de las grandes autoras mundiales en el campo de los relatos breves.
Sólo en uno de estos cuentos o relatos, con el mismo título que el libro, se nos descubre que existen unos insectos, llamados coccidae, que son los responsable de producir esta mal llamada miel del desierto, ya que las abejas no intervienen en su elaboración y siempre serán necesarias las abejas para poder incluir la denominación miel.
En favor de la autora debemos decir, que la obra original en inglés lleva el título de honeydew (mielato), título que sí sería correcto, ya que mielatos son las secreciones de partes vivas de plantas o excreciones de insectos chupadores presentes en las partes vivas de plantas.
Diferencia entre la mielada o mielato y la miel de mielato
Los mielatos, son secreciones de partes vivas de plantas o excreciones de insectos chupadores presentes en las partes vivas de plantas.
Para poder utilizar el nombre de miel de mielada, la mayor parte de la miel debe proceder de excreciones de insectos chupadores de plantas (hemípteros) presentes en las partes vivas de las plantas o de secreciones de las partes vivas de las plantas que deben ser recogidas y mezcladas con los enzimas de las abejas.
En cuanto al milagro del maná en el desierto, recogida en la Biblia, y que ayudó a los israelitas liderados por Moisés a sobrevivir en el desierto, la autora Edith Pearlman nos explica en su relato una posible versión de lo que sucedió.
Eran muchos los usos de la mierda. El más delicioso era el maná. A Emily le encantaba la historia de Moisés cruzando el desierto al frente de los israelitas famélicos. Los insectos acudieron al rescate. El maná, que el Éxodo describe como una fina escarcha que cubría el terreno y que sabía a miel, se consideró un milagro de Dios, pero en realidad era excremento de coccidae.
Las coccidae se alimentan de la savia de las plantas. El líquido azucarado le corre por las tripas y les sale por el ano. Un solo insecto puede procesar y expeler muchas veces su propio peso en una hora. Apartan el material con las patas traseras y este cae planeando hasta el suelo. Los nómadas siguen comiéndoselo-les encanta. Lo llaman miel del desierto.
Qué son los insectos coccidae
Dentro de la familia de insectos coccidae, existen ciento de especies, y podemos encontrar a la cochinilla negra o Saissetia oleae, cochinilla del delta o o Coccus perlatus, cochinilla blanda o Coccus hesperidium y a la cochinilla cerosa o Ceroplastes sp entre otros.
Al superar su capacidad de alimentarse, suele excretar los azúcares, que quedan disponibles para otros insectos como hormigas o abejas.
En mieladictos.com tenemos varios artículos relacionados con mieles de mielatos, como el dedicado a la miel de metcalfa,donde las abejas recogen la secreción de este insecto o las mieles de encina-roble, cuya miel se obtiene a partir de la savia sobrante que exudan estos arboles.
Reina
hola, me venden miel del desierto, argumentando que es mucho mejor. ¿Es verdad? sirve más que la miel pura?
Alberto
Hola Reina, opino que tiene las mismas propiedades que el resto de mieles. Si se quiere pagar la rareza o la escasez, igual sí, pero por lo demás opino que es igual.