Todo empezó cuando realizando la limpieza del trastero, encontramos una serie de objetos que llevaban a las abejas de una u otra manera dentro de su diseño. Se trataba de envases para cera de abeja que se utilizan en muebles, de un frasco de un perfume carísimo francés o de un dispensador de miel. Queríamos compartirlo e intentar que su uso o su humilde historia no se pierdan en el futuro.
Qué entendemos por objetos de apicultura vintage. Son aquellos objetos antiguos que por su diseño artístico y buena calidad y relación con las abejas o sus productos pueden recibir el calificativo de «vintage».
– Johnson Favor à la cire d´abeille. Este producto para cuidar y embellecer nuestros muebles triunfó en los años 80 del siglo XX ayudado por una campaña de publicidad que incluía anuncios en televisión. El envase anunciaba que durante siglos, la cera de abeja ha sido el «secreto» de los carpinteros para embellecer y nutrir la madera y que este spray de cera de abeja es la manera más natural de embellecer los muebles y dejarlos con un brillo duradero,
La desilusión nos la hemos llevado al leer la composición: 23% de cera mineral, 5% de cera de abeja, 50% de aceite de silicona, emulsificante 18% y un 4% de otras cosas un tanto extrañas. Vamos, que mucho publicitar la cera de abeja para acabar utilizando sólo un 5%. ¿Será que lo bueno es caro?
– Johnson Cire Liquide. Una cera líquida «enriquecida en cera de abeja, adecuada tanto para los muebles como para el parqué. Y una nueva desilusión de este preparado: los agentes cerificantes son un 10% del peso total, repartiéndose este porcentaje entre la cera de abeja (33%) y la cera de carnauba (66%). Todavía se encuentra en las tiendas.
– El frasco de perfume con abejas de Guerlain. Es un clásico del diseño empleando a las abejas. Todo viene de Napoleón Bonaparte, que eligió como emblema personal a la abeja. Y de esa larga historia, y como siempre es conveniente llevarse bien con el poder, Pochet & du Courval, vidrieros de Guerlain, crearon en 1853 el frasco de perfume con abejas, para acceder de una manera privilegiada a la mujer de Napoleón III, la emperatriz Maria Eugenia. Las baldosas que formas el tarro de cristal, están inspiradas en la cúpula de la columna Vendôme, estando decoradas con 69 abejas doradas. Cada loseta y cada abeja se ha sometido a un delicado baño de oro fino realizado por manos expertas que aplican la misma técnica que se utilizaba hace un siglo. El frasco se puede personalizar con las iniciales a petición. Todavía hoy la casa Guerlain sigue utilizando a la abeja como su icono favorito.
En el 2013 se cumplían los 160 años del primer frasco con abejas de Guerlain. Para conmemorarlo, se solicitó la colaboración al Instituto Nacional Francés de oficios artesanos. Los resultados pudieron disfrutarse en una exposición temporal en la tienda Guerlain de los Campos Elíseos y ahora en la siguiente dirección de la revista Vogue.
El diseño en cucharas para verter miel. Es el que más nos gusta. Probablemente descatalogado, fue puesto en el mercado en los años 60. Acero inoxidable, madera de teca, un pequeñó apoyo para dejar en la taza…Una joyita.
Hay muchos otros objetos como los aquí presentados, pero eso será otra historia…Quedamos a vuestra disposición en los comentarios o en la sección de contacto para recibir vuestros «descubrimientos» vintage relacionados con la apicultura.
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