Ya decía Teofrasto, un filósofo griego del siglo III a.C. : «El tomillo florece hacia el solsticio de verano, época en la que lo liban las abejas, y es un presagio para la miel, pues los apicultores esperan un buen resultado cuando su floración es abundante. Las lluvias lo perjudican, y hacen caer la flor».
También leemos, que «en la Edad Media, los bordados de ramas de tomillo coronados por una abeja representaban la fiereza y el valor, mediante el aguijón; y la piedad, la compasión y la dulzura, mediante el tomillo».
Comprobada la relación de las abejas con el tomillo desde hace siglos, ahora sólo nos falta hablar de esta fabulosa miel , o mejor, hablar de las mieles de los diferentes tomillos (Thymus sp), ya que esta familia abarca una serie de plantas con características comunes, como son el ser generalmente leñosas de porte bajo, con hojas pequeñas y peludas, muy aromáticas y de flores blancas o rosadas.
Según el libro «Mieles españolas», de Concepción Sáinz y Carmen Gómez, las provincias de Valencia, León y Granada son las zonas donde se producen mayores cantidades de esta miel, que es de color ámbar oscuro, olor a tomillo (con un claro componente fenólico, muy intenso y persistente), así como un sabor fuerte (dulce con notas ácidas).
Es necesario que la miel contenga un 15% de polen de tomillo para que sea considerada monofloral. Escasa tendencia a la cristalización. La producción de esta miel empieza a finales de primavera y se prolonga en los meses de verano.
Repasamos las variedades principales de tomillos para entender que no todas las mieles de tomillo proceden de la misma variedad.
- Tomillo común (Thymus vulgaris). Sus flores aparecen de mediados de primavera hasta bien entrada la época estival y se presentan en racimos terminales, de color violeta, púrpura y a veces blanco.
- Tomillo salsero, tomillo blanco o tomillo aceitunero (Thymus zygis). Cuenta con muchos nombres comunes, que más que ayudar, suelen producir confusión. Sus flores blancas las podemos ver desde Mayo a Julio. Se encuentra en toda la Península Ibérica, a excepción de la zona cantábrica, Cataluña y Levante.
- Tomillo serpol (Thymus serpyllum).
Conocido lo anterior, pregunta a tu mielero de confianza, y lánzate probar una auténtica miel de tomillo.
Otros artículos de Mieladictos que te pueden interesar:
Javier García González
Yo creo que el tomillo más común es el thymus vulgaris. Casi en todos los luagres de España he encotrado miel de tomillo.
Alberto
Gracias por tu comentario. En muchos casos nos ofrecen miel de tomillo, pero como miel monofloral de verdad, que cumpla todos los requisitos de esta miel, no es tan fácil.