Nos ha parecido una idea brillante esto de repartir la miel a los clientes en bicicleta, ya que es un medio de transporte que no contamina, y que además ayuda a estar en forma. Desafortunadamente no siempre es posible llegar a los consumidores de este producto de la colmena en bicicleta, pero cuando esto sucede, «miel sobre hojuelas».
La idea de utilizar la bici para entregar un producto no es nueva, e iniciativas parecidas a esta de la miel las hemos encontrado en la distribución de productos de la huerta, pan y bollería, en tintorerías o en servicios de pequeña mensajería en ciudades.
Queremos destacar dos iniciativas, que pudieran servir de inspiración a nuevos emprendedores, y donde hemos detectado muchas ganas de hacer las bien las cosas.
- The Beez Kneez, fundada por Kristy Lynn Allen en Minneapolis, estado de Minnesota (EE.UU).
Basta con acordar con sus clientes el tipo de miel y el día de entrega (jueves o viernes), y la responsable tomará su bici con carrito, y aparecerá por tu casa con la miel, siempre y cuando tu vivienda se encuentre en su zona de reparto.
Casi 4000 kg de diferentes mieles han sido repartidas en bicicleta en el año 2015.
Así de fácil y con un eslogan magnífico: obtén miel de tu propio código postal.
También ofrecen la opción a sus clientes que no se encuentran en su ruta de entrega, de acercarse al mercado o tienda local más próxima donde se encuentra su miel.
Y esto no es todo, The Beez Knees también ofrece formación apícola, elabora su propia mostaza con miel, crea comunidades en torno a colmenares urbanos, y permite que otros pequeños apicultores locales realicen la extracción de la miel en sus instalaciones, utilizando como motor un sistema a pedales.
Mejor una imagen que mil palabras.
Y como esta gente no para, se han puesto a pilotar un proyecto llamado Abejas sanas, vida sana, donde ha propuesto un montón de iniciativas a la sociedad para proteger a los polinizadores (se lucha por tener espacios verdes libres de plaguicidas, se presiona a los políticos locales para que promuevan iniciativas en defensa de las abejas y se plantan semillas de flores amigables para las abejas).
- Velohonig, impulsada por Jens Bemme, desde Dresde (Alemania), nos ofrece otra visión de cómo combinar miel y bicicleta.
Su propuesta es ir a buscar la miel a casa del apicultor, eso sí, en bicicleta, y en pequeñas cantidades, para poder repetir pronto con una nueva salida.
Lo que nos puede proporcionar esta experiencia es un contacto con el entorno rural y su naturaleza, enriquecedoras conversaciones con los vendedores, y aprovecharse de un mejor precio al no tener intermediarios.
¿No es una buena idea?
Velohonig miel con pedales. Fuente: velohonig.de
Luis Bellido Zanabria
Interesante artículo, felicitaciones
Alberto
Hola Luis, gracias por hacernos llegar tu comentario. Abiertos a recibir tus sugerencias sobre otros temas que te puedan parecer interesantes.