A esta abeja se la busca, no por mala o peligrosa, sino por su escasez, ya que muchos expertos creen que ha podido desaparecer, y son ya 36 los años sin que haya sido vista.
Su nombre científico es Megachile pluto, pero también es conocida como abeja de Wallace, ya que fue Alfred Russel Wallace el primero en recoger y documentar un ejemplar en 1859, mientras se encontraba trabajando en las islas Molucas de la actual Indonesia.
Sobre Alfred Russel Wallace (1823-1913)
Durante 8 años este naturalista británico estuvo explorando la vida salvaje en las islas malayas, recogiendo durante este tiempo, desde 1854 a 1862, la espectacular cifra de 125 660 especies, 1000 de ellas desconocidas hasta entonces (200 nuevas hormigas, 900 especies de escarabajos y 212 pájaros).
De la importancia de esta abeja sólo se fue consciente cuando los especialistas del Museo Británico lo destacaron en sus comunicaciones.
Por todos sus trabajos, Wallace es considerado junto con Charles Darwin de la teoría de la evolución mediante selección natural.
Qué sabemos de la abeja gigante de Wallace o Megachile pluto
La hembra de esta abeja tiene un peso que es 15 veces el de la abeja de la miel. Mide de largo 4,5 centímetros, así que es difícil que pase desapercibida.
El macho es más pequeño que la hembra, alcanza 2,3 centímetros de longitud.
Sus mandíbulas tipo escarabajo son una de las características que hacen a esta abeja diferente del resto.
Hasta donde sabemos, la abeja de Wallace construye su «casa» dentro de los nidos de termitas de la especie Microcerotermes amboinensi, así que los posibles buscadores de esta abeja ya saben por dónde empezar.
Otras pistas que nos ofrece Adam Messer, el último entomólogo en encontrar estos ejemplares en 1981, son las siguientes:
-Con sus mándibulas realizan agujeros en la mitad superior de los nidos de termitas, de 3,5 centímetros de diámetro, y con una extensión de más de medio metro.
– En sus nidos, que estarán bien aislados de las termitas vecinas con las resinas que recogen de los árboles, encontraremos unas 6 hembras de abeja de Wallace, acompañadas de 3 o 4 machos, que intentarán sacar adelante a una docena de nuevas abejas.
-Fue en las isla de Bacan, en el norte de las Molucas (Indonesia) donde fueron descubiertas por primera vez.
Si pasaron más de 120 años desde que Wallace identificara a la primera gran abeja hasta que Adam Messer halló otros ejemplares, ¿ cuánto faltará para un nuevo avistamiento?
Poma
a ver si la volvemos a ver! 🙂
Alberto
Esperemos que sí. Gracias por comentar.
Turbobee
Pues parece que hace poco la han vuelto a ver, una buena noticia.
https://www.xataka.com/investigacion/casi-40-anos-despues-reaparece-megachile-pluto-abeja-grande-mundo
Alberto
Desde luego que es buena noticia. Gracias por compartirlo.