Se llama Ronald Fischer, es propietario de una granja entre Orion y Coal Valley (USA) y es la persona que aparece en la foto llamada «Bee man» o «Beekeeper», perteneciente al proyecto «American West Project», realizado por Richard Avedon (Nueva York 1923-2004).
Este proyecto duró 6 años y fue encargado a este célebre fotógrafo por el Museo Amon Carter de Fort Worth, en Texas.
Historia de la foto el hombre con abejas, Bee man, de Richard Avedon.
Ronald respondió en 1981 a un anuncio en una revista de apicultura de Estados Unidos (American Bee Journal), que buscaba a un hombre o a una mujer que quisiera ser fotografiado con abejas por un «fotógrafo importante».
Aunque por entonces su actividad principal no era la apicultura, él siempre había querido hacerse la «barba con abejas«, en la cual un enjambre se reúne en la cara de una persona, atraído por una abeja reina dentro de una pequeña caja colgada del cuello.
Con su Polaroid envió una foto sin abejas y vestido. Fue elegido.
No recibió de Richard Avedon otras instrucciones mas que estuviera tranquilo, que no se moviera para poder hacer la foto, que evitara sonreír y que mirara hacia adelante.
Un entomólogo de la Universidad de California, aplicó una feromona propia de la abeja reina sobre el cuerpo de Ronald, en las zonas del pecho y de la cabeza.
Alejadas unos metros, se colocaron unas colmenas.
Al detectar la feromona, las abejas acudieron y aterrizaron sobre su cuerpo.
Algunas intentaron entrar por los orificios de la nariz, pero Ronald se encargó de expirar aire para disuadirlas.
Cuando le preguntan, él se muestra muy orgulloso de que su foto aparezca publicada en muchos libros y de estar presente con esta obra en los grandes museos del mundo.
Para ello, tuvo que aguantar cuatro picaduras, dos de ellas en los labios, que no le produjeron efecto alguno. La sesión fotográfica duró hora y media.
No hay sólo una foto de Bee man
Existen dos fotografías del «bee man», una llamada «the Buddhist» por Richard Avedon, por la ausencia de sufrimiento, y la otra, a la que llamó la «versión cristiana,» por el dolor expresado.
Libros especializados, foros de internet, mucha gente parece tener una opinión sobre esta obra.
Algunos explican que la foto «Bee man» puede significar un grito del autor hacia una posible vida futura después de la muerte, identificando al «Bee man» con el Lázaro de la Biblia.
Otros afirman que la idea le vino al autor en un sueño, «un hombre con abejas sobre todo su cuerpo».
En cualquier caso, es de admirar la serenidad y la naturalidad en el porte del Sr. Fischer ante semejante reto. Ya quisieran muchos…
Maria Luisa
Me ha gustado el artículo. Animaros a que sigaís contándonos cosas tan interesantes como estas.
mielesdelrudron
Gracias por tus ánimos. No es fácil unir fotografía con miel o abejas, pero lo seguiremos intentando.