Aquí hay una historia bien bonita. Es lo primero que pensamos al leer lo que Matthew Willey se había comprometido a realizar: pintar por sí mismo 50 000 abejas en paredes y muros de todo el mundo.
Esta iniciativa personal pretender llamar la atención sobre el problema de la desaparición de las abejas y dar a conocer en la sociedad las virtudes de este pequeño insecto.
El origen de esta idea de pintar 50 000 abejas
Todo comenzó en su apartamento de la ciudad de Nueva York, cuando vio una abeja desplazándose por su alfombra sin poder volar, y Matthew se detuvo para observar.
Un par de horas estuvo con la abeja antes de su muerte, y fue tal la impresión que le causó, que le hizo reflexionar sobre lo que estaba pasando con ellas.
Se puso a investigar y pudo comprobar el altruismo de esta sociedad de abejas, que llega hasta el abandono de la colmena por parte de abejas enfermas para no contagiar al resto de su comunidad.
Y aquí es donde se dio cuenta de algunas similitudes entre la colmena y la sociedad humana.
Y decidió implicarse y dar a conocer en la sociedad los problemas que tienen las abejas en la actualidad.
Un poco de filosofía de esta iniciativa
Matthew lleva más de 25 años realizando pintura mural.
«Cuando conectamos, prosperamos».
La salud y éxito de los individuos se basa en las conexiones que se establezcan dentro del grupo, pero también entre los diferentes grupos que forman una sociedad.
Esta es la filosofía del artista que está impulsando esta iniciativa, y que ha enfocado a ello sus esfuerzos, conectar con la gente, establecer vínculos…y la forma de hacerlo es pintando abejas.
Ah, el número de 50 000 abeja no es un capricho. Se considera una población de abejas adecuada para poder tener una colmena saludable.
Y como dice el promotor de esta iniciativa, no hace falta ser apicultor para ayudar a las abejas. Estamos de acuerdo.
Algunos lugares donde puedes encontrar alguna de estas abejas
Su primer mural fue en el edificio de un local de apicultores, en Labelle, Florida, cuando se enteró de una normativa que prohibía pintar murales en las paredes de los edificios. Todo un reto.
Ofreció gratuitamente sus servicios si la ley cambiaba, y como se logró y fue autorizado, pasó 10 semanas cumpliendo su palabra.
También la sede central de Burt´s Bees, en Durham, Carolina del Norte, ha sido decorada por este artista. Tiene sentido que una empresa que se dedica a la cosmética apícola, contribuya a difundir esta iniciativa.
Museo de Carolina del Norte de Ciencias Naturales. Por supuesto, que aquí tampoco podían faltar.
En remolques de camiones, como en esta iniciativa anual llamada Burners and BBQ en Ashville, Carolina del Norte, que mediante el arte pretende transformar el entorno
Cómo ayudar en esta iniciativa
Además de poder hacer donativos en su página web, www.thegoodofthehive.com, también podemos adquirir objetos en su tienda.
-500 de sus 50000 abejas han sido pintadas por el artista a mano, y puestas a la venta con el objetivo de reunir fondos para una próxima exposición.
-Sobre patinetes, se han impreso alguna de sus abejas. ¿No quedan bonitos las abejas sobre ellos?
Otros objetos con los que ayudar son camisetas, grabados…
No sabemos las abejas que le quedan por pintar a Matthew, pero seguiremos ilusionados con este proyecto.
Su propósito es llevar a las abejas a muchos rincones del mundo, ya que quiere hacer 50 murales.
Y ahora nuestra propuesta tras aprender con esta excepcional iniciativa.
¿No sería bonito que mucho de los grafitis que vemos en nuestras ciudades llevaran también algún insecto, como por ejemplo, la abeja?
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